Bioimpedancia eléctrica: Todo lo que necesitas saber

Desde que apareció la primera báscula de bioimpedancia en las tiendas de electrodomésticos y fitness, a mediados de los ochenta, este método de medición de composición corporal se ha hecho muy popular por su facilidad de uso.

Pero, ¿Qué es exactamente la bioimpedancia? ¿Cómo funciona? ¿Es realmente precisa? Vamos a verlo.

¿Qué es la bioimpedancia?

La impedancia bioeléctrica (BIA), también conocida como bioimpedancia eléctrica, es una técnica de análisis corporal, que permite conocer de manera sencilla la composición corporal de cada uno. Es decir, el porcentaje de masa magra, grasa y agua presente en cada uno de nosotros. Siendo la parte grasa, la que más preocupa.

Consiste en hacer pasar por el cuerpo una pequeña corriente eléctrica a través de placas de metal. Esta corriente se transmite más rápidamente por tejidos muy hidratados como los músculos, que por tejidos grasos. Así que según la resistencia que encuentre dicha corriente, se calcula la cantidad de masa magra, grasa y agua.

Básicamente se pasa una pequeña corriente del orden de 1-10 μA entre dos electrodos. Y se aplica la ley de Ohm (V=IR).

Precisión

Los primeros estudios de investigación mostraron que los resultados eran bastante variables y muchos no consideraron que proporcionara una medida fiable de la composición corporal.

Sin embargo, en los últimos años, las mejoras tecnológicas han hecho que el BIA sea bastante más fiable, como la tecnología Innerscan de Tanita. Aún así, el método DEXA y la resonancia magnética siguen siendo los métodos de referencia en el análisis de la composición corporal.

Los aparatos que miden nuestra composición corporal por bioimpedancia, sean básculas o no, presentan algunas particularidades para determinar la exactitud de sus mediciones.

Hidratación:

La deshidratación afecta a las mediciones del BIA, ya que provoca un aumento de la resistencia eléctrica del cuerpo. Se considera que provoca una subestimación de 5 kg de masa libre de grasa, es decir, una sobreestimación de la grasa corporal. (Fuente)

Momento de la medición

Las mediciones de grasa corporal son más bajas cuando las mediciones se realizan poco después de una comida, causando una variación entre las lecturas más altas y más bajas del porcentaje de grasa corporal tomadas a lo largo del día de hasta un 4,2% de grasa corporal.

Ejercicio

El ejercicio moderado antes de las mediciones provoca una sobreestimación de la masa libre de grasa y una subestimación del porcentaje de grasa corporal debido a la reducción de la impedancia.

Por ejemplo, el ejercicio de intensidad moderada durante 90-120 minutos antes de las mediciones del BIA provoca una sobreestimación de casi 12 kg de masa libre de grasa, es decir, la grasa corporal está significativamente subestimada.

Por lo tanto, se recomienda no realizar el BIA varias horas después del ejercicio de intensidad moderada o alta. (Fuentes)

¿Es fiable la bioimpedancia?

Con todo lo que hemos dicho, habrá quien pìense que no es un método fiable. Sin embargo, si se tienen en cuenta estas pautas es perfectamente válido, sobretodo para su uso en la medición de los cambios en la composición corporal a lo largo del tiempo de los individuos.

Es decir, independienetemete de que en un momento puntual el aparato tenga un sesgo X, tendrá el mismo sesgo a lo largo del tiempo, y por tanto sí nos permite conocer nuestra evolución, aunque el porcentaje de grasa corporal no sea exacto.

Se ha comprobado que el uso de frecuencias múltiples en dispositivos BIA específicos que utilizan ocho electrodos tiene un método de correlación del 94% con DEXA al medir el porcentaje de grasa corporal. La correlación con DEXA es tan alta como el 99% cuando se mide la masa magra, si se siguen unas pautas estrictas.

Para un uso profesional, es un método válido, pero siempre deberemos usar un buen monitor o báscula de bioimpedancia profesional de gama alta.

Recomendaciones

  • Debe estar en ayunas: sin haber comido en las últimas 4 horas, como mínimo.
  • Orinar antes de medirse.
  • Evitar tomar diuréticos como café o té.
  • No haber hecho ejercicios intenso 12 horas previas, o moderados 2 horas antes.
  • No estar mojado, es decir, no haberse duchado o bañado antes de la medición.

Historia de la bioimpedancia

Las propiedades eléctricas de los tejidos han sido descritas desde 1872. Estas propiedades se describieron además para una gama más amplia de frecuencias en una mayor gama de tejidos, incluidos los que estaban dañados o experimentaban cambios después de la muerte.

En 1969, Hoffer llegó a la conclusión de que una medición de la impedancia de todo el cuerpo podía predecir el agua corporal total.

La ecuación (el valor cuadrado de la altura dividido por las mediciones de la impedancia de la mitad derecha del cuerpo) mostraba un coeficiente de correlación de 0,92 con el agua corporal total. Esta ecuación, según demostró Hoffer, se conoce como el índice de impedancia utilizado en el BIA.

En el década de los 70 se establecieron los fundamentos del BIA, incluidos los que sustentan las relaciones entre la impedancia y el contenido de agua del cuerpo. Entonces se comercializaron diversos analizadores BIA de frecuencia única, como RJL Systems.

En 1980, Lukaski, Segal y otros investigadores descubrieron que el uso de una frecuencia única (50 kHz) creaba muchas limitaciones técnicas en el BIA. El uso de una frecuencia única era inexacto para las poblaciones que no tenían el tipo de cuerpo estándar.

Para mejorar la exactitud del BIA, los investigadores crearon ecuaciones empíricas utilizando datos empíricos (sexo, edad, etnia…) para predecir la composición corporal de un usuario.

En 1986, Kushner y Scholler publicaron ecuaciones empíricas utilizando el índice de impedancia, el peso corporal y el sexo.

Sin embargo, las ecuaciones empíricas sólo eran útiles para predecir la composición corporal de la población media y eran inexactas para fines médicos en el caso de poblaciones con enfermedades.

En 1992, Kushner propuso el uso de frecuencias múltiples para aumentar la precisión de los dispositivos BIA para medir el cuerpo humano como 5 cilindros diferentes (brazo derecho, brazo izquierdo, torso, pierna derecha, pierna izquierda) en lugar de uno.

Al principio las básculas Tanita lideraron el mercado, aunque hoy hay marcas nuevas que están pisando fuerte, como el peso Xiaomi, la báscula de bioimpedancia más vendida.

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